miércoles, 25 de enero de 2012

Los pros y los contras del periodismo

Quizás todavía no soy ninguna experta, ni seguramente lo llegaré a ser, del periodismo. Sin embargo, 4 años trabajando en medios, una licenciatura en Periodismo y un Máster en medios en Internet me ha dado una versión amplia de lo que es el noble arte de informar. Con estos datos creo que estoy en posesión -y si no lo estoy, este es mi blog y lo voy a hacer de todas formas- de contar lo bueno y lo malo de este oficio. Allá voy.

Los pros

Aunque hay demasiados, intentaré condensar en los que considero más importantes:
  • El valor de informar. Poder contar qué sucede en el mundo, en tu ciudad o en el mundo tecnológico es algo tan increíble que sólo se puede explicar de una forma: experimentándolo.
  • La información en tus manos. Aquello de que la información es oro es verdad. Es algo que he ido comprobando con el paso del tiempo, quién más datos tiene en su mano, es más poderoso y los periodistas tenemos y ofrecemos mucha información aunque todavía hay demasiada que, por desgracia, no sale a la luz.
  • Superarse día a día: a veces leo relatos escrito cuando todavía estaba en Bachiller o mis primeras noticias escritas en la Universidad y me rió de mi misma, el cambio de escritura es clara. No sólo los años sino también la experiencia nos ayudan a mejorar día a día, conocer más datos sobre más asuntos y en definitiva, estar continuamente enriqueciéndonos.
  • Las amistades: el periodismo para mi no sólo es un trabajo sino también una forma de vivir. Muchas de las personas que me rodean son del gremio y no sé si por eso o porque me he encontrado con muy buenas personas por el camino, creo que los periodistas somos buena gente con quien también tomar unas cañas.
  • Los eventos. Vale las ruedas de prensa suelen ser momentos de reencuentro con colegas de otros medios, pero lo que de verdad es divertido son los eventos. Cuando una empresa gasta unos miles de euros en un cóctel, un músico o una sala de fiestas para presentar su novedad es algo que no te puedes perder.

Los contras

Como todo en esta vida, el periodismo también tiene su lado negativo pero ¿cuáles son esos puntos negativos?
  • Manipulación. Si efectivamente la manipulación existe y la objetividad es una utopía. No obstante, las acusaciones que los periodistas nos toca vivir a díario no suelen más que generalizaciones que normalmente no tienen hechos infundados. Siempre defenderé el periodismo y la ética periodística aunque haya muchos profesionales que se la pasen por ...., la mayoría no somos así.
  • La publicidad. Cualquiera que esté en el mundo sabrá que muchos medios viven EXCLUSIVAMENTE de la publicidad. Y este es un lastre que mueve el periodismo; publireportajes, noticias un poco exageradas, las no noticias...todo porque el anunciante no se sienta perjudicado y siga dando de comer al medio. Es un perjuicio para el periodismo pero "más triste es robar", suelen decir.
  • Intrusismo: aunque tenog compañeros que no son periodista de profesión pero si quizás de devocción y que lo hacen tan bien o mejor que yo, creo que cada día hay más personas que por el mero hecho de escribir un blog en su tiempo libre, se creen periodista. Esta profesión es mucho más que eso.
  • El deterioro de nuestro trabajo: las nuevas tecnologías, la superabundancia de mano de obra y el declive de la profesión ha llevado a que muchas empresas paguen -o incluso no paguen- auténticas miserías por hacer periodismo. La verdad que me parece un insulto y mucho más cuando se acepta trabajar sin cobrar. La esclavitud acabo hace mucho tiempo pese a que algunos sigan fomentándola.
Viendo este listado quizás sea verdad aquello de que el periodismo no es una profesión sino una devocción, un modelo de vida y una pasión. No obstante, me siento aliviada viendo que muchos siguen confiando en el periodismo y en los cambios que se están dando. 

sábado, 7 de enero de 2012

Una de cal y una de arena

Ejercicio de autoconocimiento que de vez en cuando no viene mal:


Fuerte pero débil, extrovertida, impulsiva y cabezota. Empatica y generosa tanto que a veces soy tonta, ingenua y directa hasta ser cortante. Divertida. Exigente, responsable y metódica. Valiente pero con un gran miedo, la soledad. Protectora con los demás y poco cuidadosa con una misma. Creo en momentos felices no en felicidades completas. Así me veo yo y así seguramente soy. Pero hay mucho más.

Me gusta el olor a gasolina, pegamento y lluvia en verano. No tengo demasiada afinidad con los animales pero no puedo remediar sentir devoción  por los niños. Mi color es el rojo; la pasión, fuerza y coraje que a veces me falta y mi número el 5 porque mi familia tiene mucho de esa cifra. Mi ojo derecho es mi gorda, no lo puedo remediar. No tengo ningún arte para pintar o envolver regalos, las manualidades no son lo mío. Soy de montaña porque no tengo cuerpo para las playas pero me encanta el sonido de las olas, es el ideal para relajarse.

Odio la hipocresía, el egocentrismo y las personas que creen que están por encima de las demás. Pero siento debilidad por la gente que me hace reír y me demuestra lo que muchas veces no veo; mis virtudes.Tengo todo el tiempo del mundo para los demás, pocas veces puedo decir que no aunque me falta tiempo para conocerme a mi misma. Me río con los chistes malos. Sí, soy más de reír que de llorar, al menos, con los demás.

Pese a que yo misma rompo mis principios muchas veces, me considero feminista, en su verdadero sentido, el de igualdad entre hombre y mujer. No creo en la clase política y en los radicalismos, me quedo con la gente de a pié con opiniones encontradas que me aportan mucho más. Entre ella, con Windarti y Yulia, mis dos niñas apadrinadas que están muy lejos pero a la vez muy cerca.