miércoles, 4 de diciembre de 2013

Manías estúpidas


Hoy me he dado cuenta que tengo muchas manías estúpidas, más allá de las tecnológicas que ya os conté, que no tienen ningún sentido. No tengo ni idea de dónde vienen, ni por qué pero están ahí. No lo puedo evitar.

Supongo que cada uno tiene las suyas. Pero hoy me apetece compartir las mías después de un "duro" día de comida navideña y torneo de futbolín corporativo donde no he salido muy bien parada -con lo bien que ha empezado todo jejee-. En fin a lo que vamos a por las manías que admitirlas siempre es el primer paso.

  • Botella medio llena. Al rellenar una botella siempre lo hago a la mitad. Ni más ni menos. Si la lleno más directamente me cuesta beberla el doble y si la lleno menos siempre me quedo con sed. Es una tontuna pero es mi tontuna.
  • Armarios cerrados. Cuando veo un armario a medio abrir o abierto, tengo que cerrarlo. Supongo que es una cuestión de orden pero si lo veo abierto y no lo cierro es como el universo no está sincronizado y me pongo nerviosa. 
  • Limpiar antes de sentarme. Una de las manías quizás más sanas es que soy incapaz de cenar y sentarme. Hasta que no termino de limpiar, no puedo sentarme por muy cansada que esté o lo tarde que sea.
  • Persiana medio bajada. En este caso quizás es una cuestión de cagoliquis -miedo en el diccionario veroskiano-. No me gusta dormir con la persiana bajada completamente porque me da la sensación de agobio.
  • No abrir el maletero. Quizás está la sufran más unos que otros -lo siento, Nico- pero no me gusta abrir el maletero del coche cuando ya está aparcado. Me explico. Si tienes que sacar algo del maletero ¿Por qué no lo dejas en la parte trasera cuando sales de tu punto de partida? La intención es que nadie sepa que tienes en el maletero una vez llegado a tu destino. Creo que está manía es de mi padre y su afán de aparcar delante de las cristaleras de los restaurantes de carretera para después poder ver el coche desde la mesa. 
[Actualización]
  • Bolsillo invisible. Se me olvidaba hablar de una de la más típicas y curiosas manías. Meter mi mano en el pijama creando un bolsillo imaginario. Debe ser útil para calentarme las manos, no le encuentro otra explicación.

Y por el momento ahí dejo mi lista. Seguro que tengo muchas más pero lo siento, hoy ya no doy para más. Puede que haya actualizaciones, mientras tanto ¿Cuáles son las vuestras? 

2 comentarios:

  1. Te doy las razones "pseudocientíficas" para tus manías. Y enumero:
    -Lo de la botella medio llena te hace ser positiva: si no la hubieras definido como medio vacía.
    -Armarios cerrados mejor que abiertos: Narnia está de población hasta arriba!
    -Lo de los asientos sucios depende del grado de continencia. Todos somos mayorcitos para hacernos popo, pero nunca se sabe.
    -Muchas persianas medio bajadas al salvado de la muerte completa a otros tantos vampiros. Te lo juro por Vlad El empalador
    -Si abres el maletero invitas a Tarantino a hacer un plano visto desde dentro del mismo para recrear las miradas asombradas de los que miran allá afuera. No es plan.
    Si no te convencen mis razones, recuerda que son, ante todo, pseudocientíficas. Lo dicho.

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    1. jaja me encantan tus razones! Creo que la última la utilizaré bastante para excusarme ;-)

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